10 de febrero de 2010

Los servos

En aquella reunión en Madrid, Pérez Villegas le dio a Angelita bastantes voces, media jaqueca y una dirección de Internet: www.iearobotics.com. ¡Allí estaban los terribles Servos Futaba 3003, los clones piratas de nuestro robot!


Efectivamente, como había dicho el corbata negra, los espías se habían apoderado de todo. Era increíble; tenían incluso la ficha de la unidad Pukot que hubo que traer desde Heidelberg (Alemania). Costó carísima, recordaba Angelita. Los espías la llamaban Puchobot:


Ficha de la unidad Puchobot en poder de los espías. Compárese con la unidad Pukot del robot en La búsqueda (IV): Torrotrón.


El “Cuaderno técnico 3” era el que contenía los planos de lo que los espías llamaban Servos 3003. ¡Nuestro robot expuesto y subastado por piezas a través de Internet!


Planos del 3003 en poder de los espías


Todo esto suponía el final definitivo de Angelita. Y el del robot.


El desguace David de Augusto, situado frente al Parque Alcosa de la capital sevillana, podría ser el final definitivo del robot.
Ese o cualquier otro desguace.



(Imágenes obtenidas de www.iearobotics.com y www.daviddeaugusto.com sin ningún interés comercial o ánimo de lucro. Todos los contenidos de el ojo del boticario son ficticios)