En aquella reunión en Madrid, Pérez Villegas le dio a Angelita bastantes voces, media jaqueca y una dirección de Internet: www.iearobotics.com. ¡Allí estaban los terribles Servos Futaba 3003, los clones piratas de nuestro robot!


El “Cuaderno técnico 3” era el que contenía los planos de lo que los espías llamaban Servos 3003. ¡Nuestro robot expuesto y subastado por piezas a través de Internet!
Todo esto suponía el final definitivo de Angelita. Y el del robot.
El desguace David de Augusto, situado frente al Parque Alcosa de la capital sevillana, podría ser el final definitivo del robot.
Ese o cualquier otro desguace.

Ese o cualquier otro desguace.
(Imágenes obtenidas de www.iearobotics.com y www.daviddeaugusto.com sin ningún interés comercial o ánimo de lucro. Todos los contenidos de el ojo del boticario son ficticios)